El litoral murciano vive su mejor trimestre desde 2008: ¿especulación o tendencia estructural?
21/05/2025 - ⏱️ 3 min
Las compraventas de viviendas en el litoral de Murcia —especialmente en zonas como Águilas, Mazarrón, San Pedro del Pinatar o La Manga— han alcanzado cifras récord en el primer trimestre de 2025. Según datos del Colegio de Registradores y de Idealista Data (abril 2025), la región ha experimentado un incremento interanual del 21 % en las operaciones cerradas y un repunte medio del 9 % en los precios de venta respecto al mismo periodo del año anterior. Estas cifras no se veían desde el pico del ciclo inmobiliario previo a la crisis de 2008.
El fenómeno ha reactivado el interés por la segunda residencia en la costa murciana, tradicionalmente más asequible que otras zonas del Levante, pero también ha levantado preguntas sobre la sostenibilidad de este crecimiento: ¿estamos ante una burbuja puntual o ante un cambio estructural en la demanda de vivienda vacacional?
Qué está impulsando la demanda
El repunte tiene varios motores convergentes. En primer lugar, la revalorización del turismo nacional postpandemia ha colocado de nuevo a Murcia como una alternativa menos masificada frente a Alicante o Málaga. Además, la mejora de las conexiones por carretera y la creciente actividad del Aeropuerto Internacional de la Región de Murcia han facilitado el acceso para compradores tanto españoles como extranjeros.
En segundo lugar, el precio relativo sigue siendo uno de los más competitivos del litoral español, con valores medios de entre 1.200 € y 1.800 €/m² en zonas costeras bien ubicadas, lo que atrae a inversores que buscan segunda residencia con potencial de alquiler turístico o de uso mixto.
Por último, ha habido un resurgimiento del comprador extranjero, especialmente de origen británico, belga, francés y escandinavo, incentivado por el tipo de cambio favorable y el menor coste de vida en la zona. Algunas agencias especializadas cifran ya en más del 45 % el peso del comprador internacional en determinadas zonas de costa murciana.
¿Hay oportunidades para el inversor digital?
El auge de la demanda también se está traduciendo en nuevas oportunidades para el inversor minorista digital, a través de:
- Promociones de obra nueva en fase inicial, que buscan coinversores mediante plataformas reguladas.
- Adquisición fraccionada de apartamentos turísticos, con gestión profesionalizada y reparto de ingresos por alquiler.
- Proyectos de rehabilitación en zonas de alto potencial, especialmente en La Manga y Puerto de Mazarrón, donde el stock construido requiere modernización.
Algunas plataformas están empezando a estructurar SPVs con unidades de segunda residencia en ubicaciones premium, accesibles desde 10 € o 100 €, con retornos combinados de renta y plusvalía. Además, las autoridades locales están impulsando incentivos para proyectos que incluyan eficiencia energética, lo que mejora la valoración del activo a largo plazo.
¿Especulación o ciclo sano?
A diferencia de 2006-2008, el repunte actual no está impulsado por crédito excesivo ni por oferta descontrolada. La mayoría de las operaciones se están cerrando sin hipoteca o con niveles muy reducidos de apalancamiento, y la nueva promoción sigue siendo limitada y focalizada.
Además, el perfil del comprador es más patrimonial: personas que buscan estabilidad, segunda residencia o inversión a largo plazo con rentas estables, no especulación a corto plazo. La presión de la demanda está más vinculada a factores estructurales (movilidad, clima, seguridad jurídica) que a dinámicas financieras o burbujas puntuales.
Sin embargo, sí existen riesgos si la oferta no se adapta a la demanda real, especialmente en zonas con baja infraestructura o presión medioambiental. La clave estará en un crecimiento moderado, con producto de calidad, y modelos de financiación sostenibles.
Murcia, en el radar del nuevo inversor
El litoral murciano, históricamente infrautilizado desde el punto de vista de la inversión digital, entra ahora con fuerza en el radar de las plataformas de inversión inmobiliaria alternativa. Su equilibrio entre rentabilidad, potencial de revalorización y baja barrera de entrada lo convierte en un destino atractivo para el pequeño inversor con visión patrimonial.
A medida que se consolide la demanda y mejore la oferta de producto estructurado —tokenizado, fraccionado o financiado vía crowdlending—, es probable que esta región deje de ser un mercado secundario para convertirse en una pieza relevante del real estate minorista español digitalizado.
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