El FMI reclama a España reformas urgentes para impulsar la productividad y contener la deuda
16/06/2025 - ⏱️ 2 min
El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha publicado esta semana su informe anual sobre la economía española, y aunque destaca el sólido comportamiento macroeconómico del país en comparación con el resto de la eurozona, lanza una advertencia clara: España necesita abordar con urgencia su débil crecimiento de la productividad, una asignatura pendiente que, de no resolverse, podría limitar el potencial de crecimiento a medio plazo y comprometer la sostenibilidad de sus finanzas públicas.
El documento, difundido el lunes 10 de junio tras la tradicional misión del Artículo IV, reconoce que el PIB español crecerá en torno al 2,4 % en 2025, lo que sitúa al país por encima de la media europea. Sin embargo, matiza que esta evolución se apoya fundamentalmente en la creación de empleo, el consumo privado y el impulso de los fondos europeos, mientras que la productividad total por hora trabajada continúa estancada desde hace más de una década.
La productividad: el talón de Aquiles estructural
Desde 2013, la productividad en España ha crecido a una media del 0,1 % anual, frente al 0,8 % de Alemania o el 1 % de Francia. Este diferencial se explica por la fragmentación del tejido empresarial, el escaso peso de empresas medianas y grandes, y una baja inversión en capital tecnológico e innovación, especialmente en pymes y sectores de baja cualificación.
El informe incide en la necesidad de acelerar la digitalización, reformar el mercado laboral para incentivar la formación continua, y reducir las barreras a la competencia y al crecimiento empresarial, todavía muy presentes en sectores como transporte, servicios profesionales o distribución minorista.
“El país ha demostrado capacidad de recuperación, pero ahora debe abordar los elementos estructurales que le impiden crecer más y mejor. Una economía competitiva necesita algo más que empleo: necesita productividad”.
— Helge Berger, jefe de misión del FMI para España
Sostenibilidad fiscal en riesgo por envejecimiento y gasto estructural
Aunque la deuda pública española ha disminuido ligeramente hasta situarse en el 107,7 % del PIB en 2024 (desde el 120 % en 2021), el informe advierte que el envejecimiento de la población y el crecimiento del gasto estructural —especialmente en pensiones— podrían volver a elevar la ratio de deuda por encima del 110 % en menos de cinco años, si no se adoptan medidas correctoras.
El Fondo sugiere revisar la evolución del gasto en pensiones a la luz del nuevo sistema de revalorización automática con el IPC, y apuesta por una combinación de reformas paramétricas (edad efectiva de jubilación, incentivos al retraso) y de mejora de la base tributaria.
Asimismo, plantea revisar los tipos reducidos del IVA, eliminar deducciones ineficientes y avanzar en la fiscalidad verde como formas de incrementar la recaudación sin perjudicar el crecimiento.
Diagnóstico general positivo, pero llamado a la acción
Pese a estos desafíos, el informe mantiene una valoración general positiva del desempeño económico reciente. La inflación se ha moderado, la inversión extranjera continúa fluyendo y el sistema financiero se muestra sólido. El mercado laboral ha resistido mejor que en ciclos anteriores, y el crecimiento salarial se mantiene por debajo del nivel de alerta inflacionaria.
Pero el tono del FMI es claro: España debe aprovechar el actual contexto de crecimiento para abordar reformas estructurales profundas, antes de que el entorno financiero y geopolítico se vuelva más adverso.
El informe se publica en un momento clave para los presupuestos de 2026 y en plena negociación sobre la reforma de la financiación autonómica. La productividad, la digitalización, la demografía y la sostenibilidad fiscal ya no son retos de futuro: son el núcleo del debate económico de los próximos años.
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