Elche registra una caída del 43 % en el precio del alquiler en solo un año
10/06/2025 - ⏱️ 2 min
Un desplome inesperado en uno de los mercados más tensos de la Comunidad Valenciana
El mercado del alquiler residencial en Elche, uno de los principales núcleos urbanos del sureste peninsular, ha sufrido una contracción histórica: el precio medio del alquiler ha caído un 43 % en los últimos doce meses, según datos publicados esta semana por el portal inmobiliario Fotocasa.
La cifra sorprende tanto por su magnitud como por el contexto: en la mayoría de ciudades medianas y grandes de España los precios se han mantenido estables o al alza, impulsados por la falta de oferta y el incremento de la demanda. En cambio, Elche parece haberse convertido en un caso atípico, donde la combinación de sobreoferta estacional, pérdida de tracción inversora y ajuste de expectativas ha provocado un retroceso brusco.
El valor medio del alquiler ha pasado de los 10,4 €/m² registrados en mayo de 2024 a 5,9 €/m² en mayo de 2025, situándose en niveles similares a los del año 2020, en pleno impacto del confinamiento.
Factores detrás del desplome
Expertos del mercado inmobiliario local apuntan a tres causas principales para explicar la caída:
- Reversión del fenómeno turístico: tras un auge del alquiler vacacional en 2022 y 2023, muchos propietarios han reconvertido sus inmuebles a alquiler tradicional ante la saturación del mercado de corta estancia, lo que ha provocado un exceso de oferta no absorbida.
- Salidas de inversores minoristas: la rentabilidad del alquiler residencial en Elche ha dejado de compensar los costes operativos, especialmente tras la subida de tipos hipotecarios y los cambios fiscales aplicados a las deducciones por arrendamiento.
- Ajuste demográfico: el ritmo de crecimiento poblacional en Elche se ha estabilizado y el saldo migratorio interior se ha reducido, enfriando la presión sobre la demanda.
El resultado es una corrección de precios intensa, pero no necesariamente insostenible, según los agentes inmobiliarios consultados.
Consecuencias para el mercado
El impacto se deja sentir tanto en los arrendadores como en el ecosistema de servicios vinculado al alquiler. Agencias inmobiliarias, empresas de gestión patrimonial y promotoras locales han comenzado a reajustar sus estrategias, priorizando la venta directa o el alquiler de larga duración con garantías frente a operaciones más volátiles.
Además, este ajuste está reestructurando el mapa de rentabilidad del sureste español: mientras que en municipios cercanos como Torrevieja, Orihuela o Alicante los precios aún mantienen una ligera tendencia alcista, Elche se ha convertido en un polo de estabilización que podría incluso atraer nueva demanda por su actual accesibilidad.
Una señal para otros mercados intermedios
Lo ocurrido en Elche podría no ser un caso aislado. En otras ciudades intermedias donde se ha producido una conversión acelerada de viviendas al alquiler turístico —sin una base estructural de demanda permanente—, se observan síntomas iniciales de sobreoferta. Es el caso de zonas de interior en Cataluña, Andalucía y Castilla y León, donde los precios empiezan a mostrar retrocesos moderados.
Fotocasa señala que “en mercados sin una demanda orgánica sostenida y con crecimiento limitado de la población, las estrategias especulativas de alquiler masivo pueden tener recorrido muy corto”.
Conclusión: ¿corrección puntual o cambio estructural?
La caída del 43 % en los precios de alquiler en Elche representa, al mismo tiempo, una alerta para el sector y una oportunidad para los inquilinos. Para los inversores, es un recordatorio de que la sostenibilidad del rendimiento no se basa solo en la coyuntura, sino en la profundidad real de la demanda. Para los residentes, abre un espacio de accesibilidad que parecía perdido en muchas ciudades medianas.
El próximo semestre será clave para entender si se trata de una anomalía corregida o del inicio de un nuevo ciclo inmobiliario en los entornos urbanos secundarios.
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